Frente al incremento de las presiones sobre los recursos naturales y de la informalidad que caracteriza muchas de las actividades extractivas en la Amazonía peruana, las políticas públicas actuales muestran su limitada eficiencia. Trabajar
hacia una mayor coherencia de políticas de conservación ambiental y de desarrollo sostenible requiere formular políticas que respondan a los problemas locales y a las necesidades de los diversos usuarios de los bosques y actores de la sociedad.
Organizaciones estatales, no estatales y población local deben identificar mecanismos, incentivos o estrategias participativas innovadoras, que permitan promover acuerdos comunes para la conservación del medioambiente y la generación de mejores condiciones de vida para las personas.